Muerte en el bosque


Por Marta Luz Manríquez Morales

Ví voltear un árbol a la orilla del camino
Sentí como los espíritus de sus ramas
Daban gritos de agonía
Me extrañó no ver un río de verde sangre
Porque un árbol es también una forma de vida

Pensé en todas las primaveras
Que se llenó de pájaros
Que cobijó sus nidos
En las veces que el sol lo sorprendía
Llenando el aire con suaves sonidos de trinos

Ese árbol tenía ramas y tronco vivos
Era parte del bosque
Regalaba al hombre
Sombra y oxígeno
Me uno a la madre-tierra
En su pena profunda
Porque he visto morir
A uno de sus hijos


 Fotografía: Lorena Ledesma

Comentarios

  1. Siento ese mismo pesar cada vez que asesinan un árbol. Aunque me crié entre bosques y aserraderos, nací sentimental.

    He salvado a todos los que he podido. Espero hacer mucho más.

    Hermoso poema.

    Un abrazo fuerte.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Traiguén, un pequeño pueblo al sur del mundo

Paya de los poetas

Un mate junto a Víctor Jara